Seguimos de encierro, batallando y peleando, aunque no lo parezca, no cejamos en nuestro empeño también por haceros pasar un rato entretenido descubriendo música y, en nuestro caso particular, descubriendo a nuevas Criaturas Salvajes que es la verdadera intención y objetivo puro de esta web tanto en circunstancias normales como en este ‘apocalipsis’ de bichitos que acechan ahí fuera. Os recuerdo que el pasado lunes mi compañero en la distancia, Bernardo de Andrés, nos trajo buenas nuevas de Suecia con las BROWING COLLECTION, un enérgico combo de hard rock con muchos momentos punkoides e incursiones en el punk pop. Si necesitas que te alegren el día, ¡¡estás tías son vitamina pura!!.
Pero como mi colega y un servidor siempre estamos conectados de alguna forma más o menos extraña, ¡pues no me voy a salir de Suecia!; de la localidad de Skövde nos vamos hacia el este, hacia la capital Estocolmo, para proponeros a unos totems del Vintage Rock, los excelsos SIENA ROOT que, a priori, no tendrían razón de ser en esta website pero os voy a dar dos razones de peso en forma de CxS’s y esas no son otras que la ya coronada por estos lares LISA LYSTAM y la recién llegada, ZUBAIDA SOLID. Ponte cómodo, anda, lo vas a gozar…
Cualquier ‘die hard fan’ de los de Estocolmo me pondría a caer de un burro al ver a la banda de Simon Riffer (bass), Love Forsberg (drums), Erik Petterson (organ) y Matte Gustavsson (guitar) pasearse por Criaturas Salvajes pero, ¡ah, amig@!, sólo tenéis que ver la foto que reina encima del vídeo (que imagino estaréis disfrutando) para calmar vuestro estupor inicial y comprender que los Siena Root tienen cabida por aquí más que nunca.
Es de ley recordar que la banda se formó a finales de los 90’s en la capital del país escandinavo con el objetivo y la determinación clarísima de volver a traer el sonido analógico, el amor por los vinilos y los sonidos setenteros más puros y genuinos a la primera división musical; a reivindicar la psicodelia mezclada con folk y a experimentar con el hard rock y el progresivo con el objetivo de sonar lo más ‘retro’ posible mucho antes de que la etiqueta ‘Vintage Rock’ existiese, de hecho, si a alguien se le puede atribuir por primera vez el término en todo el globo terráqueo sería, precisamente, a los suecos (ni Kadavar, ni Dewolff, ni Datura 4, ni Spiders, ni Blues Pills, los primeros fueron Siena Root). No entraré en demasiados detalles que no vienen al caso, editaron su primer disco en 2004, A New Day Dawning, y cuentan con cinco discos más (Kaleidoskope (2006), Far From The Sun (2008), Different Realities (2009), Pioneers (2014), A Dream Of Lasting Peace (2017)) hasta llegar al disco que nos ocupará hoy y que justifica definitivamente que Simon, Love, Erik y Matte se paseen flotando por esta casa gracias a las CxS’s que hoy en día forman parte de sus filas.
Otra de las cosas que hacen a los Siena tan especiales es que no son (y nunca han sido) una formación cerrada, siempre los he visto como un colectivo democrático de músicos moderados por Simon, Love y Matte pues han sido muchas y muy variadas las formaciones que han tenido a lo largo y ancho de su carrera musical. Tanto es así que la banda muta según las necesidades de sus directos, de la demanda de bolos en acústico o en eléctrico que tengan o del concepto que desean imponer a cada disco. Como veréis, Siena Root no es una banda cualquiera sujeta a las exigencias e intereses de la industria musical, hacen lo que les sale de las pelotas y lo que les dicta su corazón y así va a seguir siendo hasta el día que dejen de existir.
Con estas directrices tan pre-claras, llegamos a 2018 produciéndose la primera conexión Criaturil ya que Lisa Lystam, la rubia cantante y compositora de la Lisa Lystam Family Band y de los propuestos por aquí, Heavy Feather, se hace habitual en sus directos convirtiéndose paulatinamente en la cantante habitual de sus conciertos. Todo pintaba de maravilla para el siguiente disco de la banda, el que hace siete en su carrera, pero todavía iba a pintar mejor pues otra incorporación femenina inesperada y rematadamente joven se va a unir a la idiosincrasia y concepto de lo nuevo que está por venir, Zubaida Solid, habitual de las actuaciones Jazz & Rhythm Blues del Stampen Pub de Estocolmo, es reclutada para hacerle la réplica a la Lystam e incluso convertirse en voz principal en muchas de las canciones del nuevo disco.
Llegamos por fin a la más rabiosa actualidad con la publicación del séptimo álbum del colectivo sueco con el premonitorio título en los días que corren, The Secrets Of Our Time (2020). Un discazo excelso, con una clase y un talento desbordante, quizás estemos hablando del mejor disco de los Siena y eso es mucho aventurarse con las seis impresionantes obras anteriores que le anteceden pero, ¡qué queréis que os diga!, tanto su concepto defendiendo un mundo analógico y natural en contraposición con el tecnológico y artificial – y que conecta a la perfección con el serio aviso/mensaje que nos está mandando nuestra a Madre Tierra-, así como la riqueza habitual del sonido y estilos de la banda son de matrícula de honor. Si a esto le sumamos la riqueza de vocales que imprimen Lisa Lystam y Zubaida Solid, ¿qué tenemos delante?…¡pues un discazo de tomo y lomo!, con momentos space psicodelia fusionados con rotundo vintage rock como el inicial «Final Stand» o el hipnótico ejercicio 60’s, «Have No Fear», tremebundas incursiones en el imaginario Deep Purple como «Siren Song» con vocales sesenteros soul de Lisa, Zubaida y la desconocida CxS pelirroja (aparece a la derecha en la foto de grupo) que también aparece en el álbum pero no he podido localizar su nombre (¿será Sanya, Chrissy, Cecilia, Anna…?, hay tantas…). El single «Organic Intelligence», «In Your Head» y «When A Fool Wears The Crown» son mis temas favoritos, cortes que van al grano, de esencia bluesy pero con un groove 70’s BRUTAL, riffs muy molones y unas teclas esenciales, incluso con momentos de lucimiento por parte de Petterson y Zubaida (sí, ella también mete teclados). Jodido placer. El exotismo y los momentos más reposados y existenciales hacen acto de presencia en «Daughter Of The Mountains» con Stiam Grimstad al sitar y la Lystam dando lo mejor de sí mismos, así como el majestuoso corte final, «Imaginary Borders», mostrando su faceta más folkie y progresiva, cercana a Jethro Tull con traveseras, clavicordios de acompañamiento y mucha, muchiiiisima clase en una composición que fluye y se despliega con total expontaneidad demostrando toda su riqueza, su final es cierto que es extraño, Matte toma las riendas con un ‘solo’ final de guitarra de fábula que acaba el tema en perfecto clímax pero que baja revoluciones con una afinación ‘desafinada’ que supongo habrá sido un acuerdo común. En cualquier caso, este detalle no desluce un trabajo de inspirada orfebrería y talento a raudales.
Y no me queda más que instaros a que exprimáis la ‘BOLA EXTRA’ dejándoos llevar por el Vintage Rock más puro y genuino de una banda única y rematadamente real, tanto en los videoclips deliciosamente ‘retro’ como en sus excepcionales descargas en directo que son un placer sentitivo y emocional al máximo nivel, ¡ya veréis!…